
Sergi Guilló, durante la rueda de prensa posterior al Ceuta-Mérida
"Un equipazo": así se ha referido Sergi Guilló a la Agrupación Deportiva Ceuta al término del partido que ha enfrentado este 3 de mayo a esta última y a su equipo, el Mérida. "Está ahí por algo", reconocía el técnico ilicitano a propósito del liderato del cuadro caballa, a cuyos futbolistas atribuye el jugar "muy bien".
Guilló sabía de buena tinta que, para el Ceuta, ganar hoy en el Alfonso Murube era "vital". Pese a haberlo intentado de todas las formas posibles, pese a haber protagonizado -a su juicio- "las ocasiones más claras del partido", al final, el combinado de la provincia de Badajoz no ha logrado siquiera puntuar en el feudo ceutí.
Decía Guilló que, antes del choque, él mismo y sus jugadores tenían claro "cómo hacerle daño al Ceuta". Lo primero era "salir bien desde atrás"; lo segundo, "hacerse con el control"; lo tercero, efectuar "jugadas de valor". Aun habiendo llevado a la práctica parte de ese planteamiento, la Agrupación ha evitado que el Mérida saliese victorioso del Murube. "Nos han causado problemas", confesaba el director técnico del club, quien ha abandonado el terreno de juego "orgulloso" de su plantilla y, con ello, convencido de que esta ha merecido, como poco, "el empate". "Tendríamos que habernos ido al descanso con un gol", lamentaba.
Ese gol -el de la igualdada- podría haber llegado en el minuto 89. Para el alivio de la hinchada caballa, Pedro López ha protagonizado una actuación estelar. "Ha hecho un paradón que vale medio ascenso", admitía Guilló, fascinado con la atmósfera hoy generada en el fortín caballa: "Me ha encantado el ambiente; ha sido muy bonito".