El juez de competición de la Federación Andaluza de Fútbol ha abierto expediente por los incidentes reflejados por el colegiado José Manuel Rica Alarcón en el anexo al acta del partido disputado por el Atlético de Ceuta y el CD Pozoblanco en el Alfonso Murube. El equipo ceutí dispone de cinco días para alegar lo que a su derecho convenga. El árbitro denuncia que el presidente de la AD Ceuta y mandamás en la sombra del Atlético de Ceuta, José Antonio Muñoz, lo zarandeó e insultó en la zona de vestuarios.
Rica Alarcón explica, en primer lugar, que una vez dentro de la zona de vestuarios sucedieron una serie de hechos que pusieron en peligro la integridad física del equipo arbitral y si no fueron reflejados en el acta del encuentro se debió a que "serían motivo de un empeoramiento de la situación", redactando lo sucedido en un informe complementario.
En el capítulo dedicado al público el colegiado granadino asegura que "en el minuto 72 un espectador varón de unos 60 años, con pelo largo canoso y gran barriga, que se encontraba en la grada situada tras mi asistente nº2, Pablo Vera García, saltó la valla que separa el campo del público en actitud muy nerviosa, pero volviendo a su asiento sin llegar a entrar en el terreno de juego. Este señor luego intervendría en los incidentes que sucedieron en los vestuarios".
El árbitro también refleja que en el minuto 89 fue lanzado desde el público el contenido de una botella de agua de medio litro al asistente noº1, Roberto Campos Torres, que se vio obligado a entrar en el terreno de juego para evitar males mayores. Rica Alarcón detalla que cuando se acercó al delegado de campo para que tomara medidas vio una botella de agua vacía de medio libro unos dos metros dentro del terreno de juego.
El colegiado también recoge que el partido se disputó sin la presencia de miembros de las Fuerzas de Orden Público, aunque añade que "pude ver un equipo de seguridad compuesto al menos por tres personas, dos hombres y una mujer, pero no asistieron al equipo arbitral en ningún momento.
Cuando concluyó el partido y se retiró a los vestuarios, el árbitro asegura que el delegado del Atlético de Ceuta, Javier Vereda Almansa, el cual antes del partido le dijo que estaba sancionado y no podía ejercer sus funciones porque Arjona Fernández había arbitrado en contra de su equipo premeditamente en un partido anterior ante el Alcalá, le gritó "hijo de puta, venías premeditado como Arjona, sinvergüenza".
Muñoz lo empujó y sujetó por los brazos
También denuncia que "José Antonio Muñoz Serrano, que según la prensa de Ceuta está ligado de alguna forma al Atlético de Ceuta, me cerró el paso justo en la entrada al pasillo y empezó a empujarme en el pecho y a gritarme en actitud violenta ¡hijo de puta, sinvergüenza, cabrón! Yo traté de apartarlo para girar a la izquierda y acceder a un segundo pasillo que conduce al vestuario arbitral, pero él pasó a zarandearme sujetándome por los brazos y gritaba ¡estáis jugando con el club y con la ciudad, sinvergüenzas, hijos de puta! Mientras sucedía esto, mis asistentes fueron insultados y zarandeados por las personas no identificadas que se encontraban en la zona de vestuarios. Ni miembros de la seguridad ni del club nos auxiliaron".
Rica Alarcón continúa su relato asegurando que temió por su integridad física cuando el trío arbitral fue rodeado por más de 20 personas que profirieron insultos como ¡hijos de puta! ¡os vamos a matar! ¡no váis a salir vivos de aquí! o ¡si no es aquí, en el barco os vamos a dar vuestro merecido! y además empujaron y zarandearon al árbitro y a sus asistentes. El colegiado refleja que "una de las personas con actitud más agresiva fue un señor de 60 años, de pelo canoso y gran barriga, que llevó a cogerme por el pecho a la altura de la camiseta a la vez que alzaba el puño y apretaba los dientes mascullando ¡te voy a matar!.
Insultos de Álvaro Pérez
El árbitro granadino también escribe en el anexo al acta que el entrenador del Atlético de Ceuta, Álvaro Pérez, se dirigió a él gritándole "eres un sinvergüenza y todo lo que te pase lo tienes merecido. Hoy has jugado con el trabajo y la ilusión de todos y pagarás por ello. También hay que tener cara para decir que sólo ha habido una jugada dudosa en el partido, cabrón... Esto está amañado, os habéis propuesto entre todos que este equipo no juegue por el ascenso".
Tras unos minutos de espera, el delegado del Atlético de Ceuta, José Javier Lorente Rodríguez, abrió la puerta del vestuario arbitral, aunque antes "alguien que no pude identificar golpeó en la parte trasera de la cabeza a mi asistente nº2". José Manuel Rica explica que tuvo que atrancar la puerta con el pie y el hombro porque no dejaban de golpearla violentamente y no cesaban los insultos.
Llamó a la Policía Nacional
El árbitro llamó por teléfono a la Policía Nacional y tras unos cinco minutos de espera hizo acto de presencia en el estadio una pareja que trató de tranquilizar a Rica Alarcón y sus asistentes. Antes de redactar el acta, el delegado del Atlético de Ceuta, José Javier Lorente, le comunicó al colegiado que no podía pagarle el recibo arbitral (381 euros) porque no había caja suficiente. El árbitro termina su relato explicando que fueron escoltados por la Policía Nacional hasta que se subieron a un taxi, seguidos por un coche patrulla y una vez en el puerto la pareja de la Policía Nacional los acompañó hasta la zona de embarque.
Pavana vete ya hijo!!!
Hacer comentarios gratuitos es muy facil, tendremos que aceptar que si no fuese por él, posiblemente no hubiese habido este año equipo en Tercera y caso contrario, casi seguro que se habría hecho el ridículo, como en años anteriores otros equipos que militaron en esta categoría.
Jajaja. Si no hubiera sido por el seguiríamos teniendo un equipo en Segunda B
¿Seguiríamos teniendo un equipo en Segunda B?. Sin el apoyo de la ciudad y con los estamentos federativos en contra, ¿tu crees?. Además con aficionados como tú, que posiblemente hace años que no acuden al Murube. ¡¡¡ VENGA YA !!!, una cosa es la persona y otra la entidad, en este caso ¡¡¡EL CEUTA!!!.