Juan Ramón se queda con el trabajo de los jugadores y el apoyo de la afición

Juan Ramón Martín ha contado como se produjeron los acontecimientos hace una semana que desencadenaron en su salida del Ceuta. "En principio era una reunión para hablar de algunos temas de la plantilla, pero cuando salgo de esa reunión ya no soy el entrenador del Ceuta". "En el viaje de vuelta de Lebrija quedamos para hablar de los refuerzos que se querían traer, pero me encuentro que el club quiere llegar a un acuerdo para rescindir el contrato. Lo he dado todo y me marcho con la conciencia tranquila", ha añadido.

El ecijano recuerda que "regresé con esa espinita clavada de mi etapa de jugador al no haber podido conseguir el ascenso y me marcho sin poder acabar un trabajo, pero con la conciencia muy tranquila porque se han hecho las cosas con las máximas ganas e ilusión. El equipo ha trabajado a destajo desde que empezó la pretemporada. No queda otra que buscar cosas para la próxima temporada", añade.

El ex entrenador del Ceuta tiene claro que "en el fútbol hay que ser transparente, no se pueden ocultar cosas, hay que ser directo, legal y honrado, y si no se está contento con una persona por cualquier motivo hay que decírselo. He intentado ser lo más honrado posible en todos los clubes en los que he estado, como jugador, secretario técnico y entrenador, y me gusta que se porten igual conmigo".

El ecijano lamenta no haber podido terminar un trabajo cuando se sentía con fuerzas para alcanzar el objetivo

La plantilla respaldaba el trabajo y el comportamiento de Juan Ramón. "He sido 14 años profesional y los jugadores son los que dan la cara, los grandes protagonistas del fútbol; siempre defenderé a capa y espada la honestidad de todos y, aunque se escuchen cosas de alguno, me llevo un grato recuerdo de toda la plantilla tanto en lo personal como en lo profesional. Me han demostrado que estaban 'a muerte' conmigo".

La AD Ceuta FC es un equipo peculiar donde no es fácil trabajar. "Este club es algo especial, la temporada se hace larga en Ceuta, hay que coger el barco cada quince días, el jugador no está aquí para ganar dinero, pero lo necesita, y los cartuchos se van quemando. Hay que dar cosas nuevas al jugador y buscar motivaciones. La plantilla es corta y algunos futbolistas han tenido que jugar con sobrecargas porque no había recambios en esas posiciones. En otras temporadas el equipo también ha sufrido un bajón en enero y febrero y por aquí han pasado grandes entrenadores y grandes plantillas. Creo que hay que sacar conclusiones y conocer por qué pasa esto".

Con la cabeza alta

Juan Ramón quiere mirar hacia adelante en el momento de su adiós. "Yo soy una persona que no le guardo rencor a nadie. Ya estuve aquí tres años de jugador, fui capitán del Ceuta, defendí su escudo a capa y espada, me lesioné de tibia y peroné, de ligamento cruzado anterior, pero me tuve que ir con dos años de contrato, habiéndolo jugado todo, y me marché con la cabeza alta. Espero que se valore mi profesionalidad y no se dude del cariño que le tengo a la ciudad y a la afición".

El Ceuta, tras el empate ante el Cabecense en el Murube, es noveno a 10 puntos del play off. El astigitano está convencido de que "conmigo se hubiera jugado el play off seguro. Es cierto que desde septiembre he pedido dos jugadores para dar más competitividad a la plantilla, aunque en la reunión me dicen que, aunque yo me vaya, no va a venir ningún futbolista más, me lo recalcan, venga el entrenador que venga".

Juan Ramón admite que si llegan refuerzos "estaré dolido porque es algo que tu has pedido hace mucho tiempo para completar la plantilla y ser más competitivos porque la temporada es muy larga. El equipo estuvo 16 jornadas sin perder y cuando llegan las lesiones y las sanciones es cuando se cae. Estoy seguro que hubiéramos salido adelante porque el vestuario quería y estaba con el entrenador".