Guillermo Vivas, el nuevo presidente de la Federación de Balonmano de Ceuta, estará rodeado de un grupo de diez personas con las que trabajará codo con codo para tratar de mejorar el funcionamiento del balonmano en Ceuta. Iván Anaya y Ángel Ruiz ejercerán de vicepresidentes primero y segundo respectivamente; Marco Arrabal será el secretario; Juan Abellán el tesorero; Rafael Almagro 'Ali' se convierte en el director técnico de la escuela de entrenadores y Abdelkader Mohamed en el coordinador del colegio de árbitros.

El nuevo presidente de la Federación de Balonmano de Ceuta, Guillermo Vivas, se ha puesto manos a la obra con el nombramiento de su junta directiva. Diez personas forman parte del equipo de trabajo que tratará reactivar el balonmano ceutí en el período olímpico 2012-2016. Vivas se ha rodeado de personas de su confianza entre las que se encuentra, entre otros, Ángel Ruiz, Rafael Almagro 'Ali' o el presidente del Club Deportivo BM. Maravillas Iván Anaya.

El nuevo organigrama de la FBMCE está configurado por dos vicepresidentes (Iván Anaya Sánchez y Ángel Ruiz García), un secretario (Marco Antonio Arrabal Sánchez), un tesorero (Juan Abellán Márquez), tres vocales (Diego Martínez Argüello, Munir Harrus Chairi y Jorge Vendrell Serrano), un vocal de comunicación y prensa (Manal Mohamed Mohamed), el director técnico de la escuela de entrenadores (Rafael Almagro 'Ali') y el coordinador del colegio de árbitros (Abdelkader Mohamed Mohamed). Estas diez personas trabajarán con Guillermo Vivas en un proyecto que busca potenciar la base para que a medio plazo algunos equipos puedan participar en competiciones andaluces, pero con mayoría de jugadores de la ciudad.

Aumentar la competitividad

Guillermo Vivas, nada más salir elegido presidente de la Federación de Balonmano de Ceuta tras vencer en las elecciones por 8 votos a 4 a Abdeselam Ahmed, aseguró que "mi equipo de trabajo busca fundamentalmente que el balonmano mejore, hay que aumentar la calidad y ser más competitivos". El nuevo presidente entiende que "el niño si no compite se aburre y si se aburre deja el balonmano. Hasta cadetes las competiciones cuentan con muchos equipos, pero cuando se llega a esta categoría la mayoría de los equipos se quedan en el camino. Hay que trabajar mucho con la base para intentar que algunos equipos puedan participar en la liga andaluza, pero siempre que estén formados exclusivamente por jugadores y entrenadores de la ciudad".

Asumiendo que el fútbol es el deporte rey y su tirón mediático muy superior al que tienen el balonmano y el baloncesto, Vivas considera que "todos los niños deben tener la oportunidad de jugar a balonmano y hay que ofrecerles cosas que no tenga el fútbol para que lo sigan practicando. El balonmano es un deporte solidario, de equipo en el que no puedes relajarte cuando defiendes o ir por libre en ataque", añade.

Fotos: África Jarque