La UA Ceutí afronta este sábado (Pabellón ‘Guillermo Molina’. 18:00 horas) el reto de poner fin a su mala racha de tres derrotas en los últimos partidos frenando a un Peñíscola que lidera con mano de hierro la clasificación de Segunda División con un pleno de 8 victorias. Santi Valladares vuelve a Ceuta para medirse a Tomás de Dios, del que fue segundo en el Santiago Futsal.
El técnico salmantino del Ceutí ha destacado la pegada de los castellonenses, un equipo “totalmente diferente, invencible, que gana todos su partidos por goleada y muy intenso en defensa. Va a ser un partido muy difícil”.
Para contrarrestar esa fortaleza de los levantinos en ambas porterías, el Ceutí ha trabajado “para intentar quitarles el balón y en algunas acciones tener mucha posesión y ser muy directos donde ellos son muy agresivos”.
El entrenador del Ceutí no oculta de que se trata de un partido “determinante porque un equipo que va a estar arriba como nosotros no puede permitirse perder cuatro partidos seguidos”.
De Dios no va a poder contar con su portero Marco Mandado, que sigue de baja por lesión, mientras que es dudosa la participación de Anuar después del fuerte golpe que recibió en un costado en el último encuentro en Zaragoza y por el que incluso tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario.
El Peñíscola se presentará en Ceuta con 24 puntos, en lo más alto de la tabla y con 6 puntos de renta sobre el segundo, el O Parrulo Ferrol. Los castellonenses aventajan en 11 puntos a un Ceutí que se mantiene quinto –en zona de ‘play off’- pese a sus tres reveses consecutivos de las últimas jornadas.
Con el Peñíscola regresa a Ceuta Santi Valladares, que ya lo hizo la pasada temporada en un partido que acabó con empate a dos goles. En su pista, los levantinos ganaron por 4-3. El técnico gallego dirigió al Ceutí en la temporada 19-20, interrumpida por la pandemia, y en la posterior, en la que lo clasificó para el ‘play off’ de ascenso a Primera y acabó cayendo en la semifinal ante el Manzanares, que fue el que terminó subiendo.